«En el año 1936 un escritor plantó unas rosas». Así comienza el nuevo libro de Rebecca Solnit, una reflexión sobre un jardinero apasionado que fue además la voz más importante del siglo XX frente al totalitarismo: George Orwell. Con su característica capacidad para establecer conexiones inesperadas, la exploración de la obra y de la vida del autor, así como de su vínculo con la naturaleza y el mundo de los sentidos como forma de no extraviarse en ideologías, se entremezcla con otras historias como la de la fotógrafa Tina Modotti, la obsesión de Stalin por hacer crecer limones en condiciones de frío extremas, la crítica de Jamaica Kincaid al colonialismo, y da pie a una reflexión sobre el placer, la belleza, el lenguaje, la esperanza y la verdad como actos de resistencia.