La relación entre los conflictos armados y la violencia sexual es un fenómeno de larga data que ha estado presente en diversos conflictos bélicos tanto premodernos como contemporáneos. Sin embargo, ha carecido de problematización, análisis crítico y de una reflexión profunda que reconozca su historicidad. En general, esta violencia ha sido normalizada y naturalizada, considerándose como una manifestación del despliegue natural de los instintos masculinos de los hombres sobre los cuerpos de mujeres. Incluso ha sido asumida como un componente inherente de estos conflictos, como si se tratase de un destino natural inevitable, una consecuencia imposible de frenar en determinados procesos. Esta perspectiva ha sido arraigada en el "sentido común" de la sociedad. Ante este escenario, Jocelyn Maldonado se ha propuesto desafiar tal naturalización y desentrañar la complejidad de este fenómeno. Es así como, a través de un análisis de la historia reciente de occidente respecto de los conflictos bélicos modernos, introduce el concepto de violencia política sexual, para luego aplicarlo al contexto de la dictadura civil-militar en Chile en el marco del Terrorismo de Estado y la emergencia del neoliberalismo. Teniendo en cuenta, claro está, de que este modelo económico-político-cultural no es fruto del desarrollo orgánico de las fuerzas sociales, sino que ha sido impuesto a partir de técnicas y tecnologías del terror. En tal sentido, este libro busca arrojar luces sobre cómo la violencia sexual como violencia política, se ha utilizado como una técnica de dominación y control.